Hoy ha sido la toma de posesión. El alcalde ha decidido no dar la palabra a la oposición en el ayuntamiento de Casar de Palomero, ignorando que, aunque teóricamente seamos minoría, la población a la que representamos es tan importante como lo es la que representan ellos.
El alcalde sigue en sus fueros, ya le he dicho, como no cambie esto, será recordado como el alcalde que dió cerrojazo a este pueblo.
De todos modos os dejo por aquí el discurso que no se me ha dejado pronunciar, me gustaría tener vuestra opinión:
"Hoy es mi primera intervención en esta sala, como representante de los casareños y las casareñas y portavoz del grupo socialista en este ayuntamiento.
Podría empezar hablando de algunas recientes noticias que explican gráficamente y evidencian lo que ocurre hoy en este pueblo pero, soy el más joven de esta mesa, y quiero demostrarlo marcando un claro cambio de estilo en todo lo que viene haciéndose desde este ayuntamiento. Para ello trataré de desempeñar mi función, junto con mis compañeros, de la mejor forma posible durante los próximos 4 años.
Todos sabemos que este pueblo se ha instalado en la crispación y en el enfrentamiento. Si ustedes tienen interés en acabar con esta situación tan destructiva, la solución es sencilla: El odio que se ha sembrado en este pueblo se morirá si no se riega.
Ustedes, que son nuestros adversarios políticos, en ningún caso enemigos, tienen en sus manos la mayoría absoluta que les permite, dentro de la LEGALIDAD, hacer y deshacer en este pueblo a su antojo. Les emplazo a hacerlo, con cordura y responsabilidad, teniendo en cuenta que no todo el mundo piensa como ustedes y que el alcalde debe velar por el bien de TODOS Y CADA UNO DE LOS HABITANTES DE ESTE PUEBLO. No traten de cargar a nuestras espaldas cargas que no nos pertenecen, son ustedes quienes tienen la mayoría.
Espero que sepan gobernar mirando al futuro y dejando atrás la infausta legislatura que nos precede. De no ser así, poco futuro tiene este pueblo. Aumentar las cifras del censo sin que eso se refleje en las calles, en la sociedad, en la actividad, en la economía y en la VIDA de este bello pueblo, es tan absurdo como tratar de apagar un incendio con lágrimas.
Ustedes deciden, a la hora de apoyar las cuestiones verdaderamente importantes para este pueblo, tendrán en nosotros a los mejores aliados posibles, pero no cuenten con nosotros para seguir destruyéndolo.
Las 9 personas que estamos aquí hoy, tenemos ante nosotros una misión nada desdeñable: representar a una población con graves heridas, que vive en medio de una convivencia rota. Es tarea de todos nosotros y nosotras arreglar esa situación. Todos somos parte del problema y todos podemos ser parte de la solución. Quien no pretenda serlo, debería irse hoy mismo.
No pretendo alargarme más y sí quiero decirles que espero que hoy se empiece a trabajar desde esta casa, que es la de todos, para que este pueblo vuelva a la paz y a la tranquilidad que nunca debió perder.
Ojalá que en los 4 próximos años la felicidad inunde todos los corazones de los casareños y las casareñas, falta hace.
Muchas gracias."